¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Últimos temas
» Ozymandias
por Ozymandias Webber Sáb Mayo 08, 2010 4:56 pm

» Noche de relax (Devon)
por Aerith Velmor Dom Abr 25, 2010 10:22 pm

» Un poco de ayuda (Hannah)
por Hannah Fleet Dom Abr 25, 2010 2:30 am

» Registro de Avatares (IMPORTANTE)
por Afry McKenzie Mar Abr 20, 2010 11:03 pm

» Hannah Fleet
por Afry McKenzie Mar Abr 20, 2010 11:01 pm

» By the beautifull sea (Hayde Levedev)
por God Sent Lun Abr 19, 2010 4:25 pm

» ¡Ah, que se nos viene la boda! ~ Claudine ~
por Claudine Bertotti Jue Abr 15, 2010 2:33 am

» Quién Posteará?
por Claudine Bertotti Miér Abr 14, 2010 11:31 pm

» como muere el de arriba
por God Sent Miér Abr 14, 2010 7:41 pm

» Madrugando (LIBRE)
por Devon Marshall Miér Abr 14, 2010 6:47 pm

» | Hayde's Relationships~
por Hayde Levedev Dom Abr 11, 2010 3:02 am

» La cabellera peliroja [Libre]
por Claudine Bertotti Dom Abr 11, 2010 12:29 am

¿Quién está en línea?
En total hay 2 usuarios en línea: 0 Registrados, 0 Ocultos y 2 Invitados

Ninguno

[ Ver toda la lista ]


El record de usuarios en línea fue de 112 durante el Miér Nov 20, 2024 2:25 pm

Giulia Angelique Roseti

2 participantes

Ir abajo

Giulia Angelique Roseti Empty Giulia Angelique Roseti

Mensaje por Giulia Roseti Mar Jul 14, 2009 12:57 pm

Nombre

Giulia Angelique Roseti.

Fecha de nacimiento

3 de junio de 1516.

Signo del zodíaco

Géminis, las dos caras.

Personalidad


El mundo la ha hecho como es : ácida y con una lengua extremadamente viperina. Su mejor recurso es el sarcasmo, al igual que el humor negro.
Puede ser muy cruel, si se lo propone; aunque normalmente ignora bastante
las cosas que le pueden herir.
Dicen que tiene el corazón cubierto de hielo, que no tiene sentimientos.
También dicen que hay algo salvaje en sus ojos, algo inhumano...


Aspecto físico

Rezuma perfección, parece una de esas esculturas romanas que se asemejan a divinidades.
Es de estatura normal, y constitución esbelta y deportiva.
Su rostro aún conserva algunos rasgos infantiles. Los ojos grandes y muy claros, rodeados de unas espesas pestañas, es lo que más destaca en ella.
Su piel pálida, contrasta fuertemente con sus ojos.
El pelo largo, ondulado y de un color claro muy brillante.
Y los labios...parecen esculpidos por un gran artista.


Historia

Nací en una tormentosa noche, rodeada de truenos y fuertes vientos que amenazaban con romper cristales.
Así que, el primer día que abría los ojos, el cielo estaba lleno de nubes, y el agua caía a cántaros.
Bonito comienzo, ¿Verdad?
Florencia, ahi es donde nací, ah sí, la Toscana.
Mi familia, era una de las más ricas dentro de la nobleza, tenía decenas de esbirros cumpliendo todas y cada una de mis órdenes, fueran cuales fueran.
Mi madre era rubia, con los ojos azules un poco más oscuros que los míos. Sus pómulos marcados enmarcaban su rostro de bellas facciones.
Era esbelta y de cuerpo atlético. Era...igual que yo.
De mi padre podría describir su cabello oscuro y los ojos verdes color esmeralda. Era alto y fuerte. Demasiado fuerte quizás, como comprenderéis después.
Y en ese rico ambiente fue donde me crié, donde me forjaron a fuego mi carácter: manipulador y capaz de hacer que nadie pudiese aguantarme la mirada.
Era de esperar. Siempre me lo habían dado todo, exceptuando el cariño de un padre, que vivía demasiado ocupado en sus estúpidas cenas con gente acaudalada.
Podría decirse que mi vida transcurrió con bastante normalidad hasta que cumplí los diez años.

EL COMIENZO DE TODO.

Mi madre, quien había enfermado al darme a luz y desde entonces no se había recuperado, murió, conmigo entre sus brazos.

La miré, parecía estar delirando. Decía cosas sobre la muerte. Sus ojos miraban fijamente un punto más allá.
Me acerqué sigilosamente a su lado y me senté junto a ella, cogiéndola de la mano.
- ¿Madre?
En ese momento ella pareció reaccionar, y me miró con los ojos vidriosos pero llenos de cariño.
- Giulia cielo, ven aquí.
Me acosté a su lado, permanecimos en silencio.
La noche estaba ya muy avanzada, pero yo seguía sin poder dormir, vigilando que su respiración no se parase.
- Giulia, prométeme que serás feliz.
Los ojos se me empañaron.
- Sí madre, y usted estará aquí para verlo.
Ella sonrió tristemente.
Unos treinta minutos después, su respiración paró, y su vida, que había sido como una luz en mi vida se apagó.


Era la persona a la que más había querido en mi vida, la única que me había comprendido.
Cuando mi padre se enteró creí que iba a enloquecer.
Se retiraba pronto a sus aposentos y cuando yo me levantaba al alba, él ya no estaba. Parecía...como si me evitase.
Yo quería saber la razón por la que me evitaba, pero ahora daría lo que fuese por no haberla averiguado nunca.

Me acerqué a él, había pasado la noche en vela para que no lograra escabullirse sin verme.
Por un momento su rostro se descompuso, como si hubiese visto un fantasma.
Los ojos me ardían.
- Padre, ¿Por qué me evita?
Su voz salió de su garganta como un sonido ronco, irreconocible.
-Te pareces tanto a ella…- la voz se le quebró, los ojos le brillaron.
Clavó una extraña mirada en mí.
Me cogió del brazo, clavando sus uñas. Creando pequeñas heridas en la muñeca.
- Me está haciendo daño, padre - logré susurrar con la aterrorizada mirada clavada en él. Sonrió siniestramente.
- Es tarde, deja que tu padre te acueste.


Y eso fue el principio. Todas las noches, desde que murió mi madre, mi padre me utilizaba como a su mujer.
Yo sencillamente, no podía evitarlo, mi habitación no tenía pestillo, y para evitar que saliese por la noche, había un guardia vigilando mi puerta.
Éste se retiraba cuando mi padre me hacía su traumatizante visita nocturna.
Y así pasaron los años.
Mi belleza se desarrolló, torturando cada día a mi padre, puesto que cada vez me parecía más a mi difunta madre, excepto en los ojos...

Mi carácter se había vuelto huraño, y extremadamente frívolo.
Había construido alrededor de mi corazón una muralla de hielo, para que nadie supiera jamás mis sentimientos.
El día de mi decimoséptimo cumpleaños, pedí un deseo: ser feliz.
Parece ser que nadie escuchó mis súplicas allá arriba.
Empezaron a buscarme un esposo. Los candidatos eran todos jóvenes ricos y en su mayoría, muy apuestos. Pero por muy guapos y acaudalados que fuesen, yo quería casarme por amor.
Se lo dije a mi padre, quién hizo caso omiso a mis ruegos.
Encontraron a mi esposo, me casaría el día 15 de agosto.
Empezaron a confeccionarme el vestido, he de decir que era precioso, pero eso no me importaba.
Los días pasaron y yo seguía sumida en una profunda tristeza, para colmo, mi padre seguía visitándome todas las noches, cosa que con solo pensar, vuelve a producirme arcadas.

EL FINAL DE MI VIDA.

Mañana sería el gran día. Me convertiría en la Señorita Smith.
No podía soportar ni siquiera la idea de casarme.
Era tarde, pero tenía que hablar con mi padre, y sabía que él estaba despierto.

Entro en su despacho, el miedo hace que la sangre me bombee con fuerza en las sienes.
Él tiene la silla de espaldas a mí.
Identifico un fuerte aroma en el aire: alcohol.
Ha bebido.
Voy a retirarme, pero su voz llega a mis oídos ronca y ahogada por la distancia :
- Giulia,, eres tú ¿Verdad, querida hija?
Suspiro.
-Sí padre, soy yo, su hija.
Asiente, los ojos perdidos en un punto por detrás de mí.
- ¿Qué quieres?
- Verá padre…quiero, necesito que cancele la boda, no quiere casarme.
Esperaba cualquier cosa menos lo que hace : se carcajea, pero no es un sonido agradable, es una carcajada amarga.
- ¿Crees que por una niña malcriada voy a perder dinero?
Me quedo de piedra. Se levanta y levanta las manos como rogando a un dios inexistente.
Me señala con un dedo amenazador.
- Te casarás mañana, aunque te tenga que arrastrar a la boda.
Mi interior se hace pedazos. Acaba de terminar de romper todo mi interior.
Trago aire desesperadamente. Valentía Giulia.
- No.
Abre los ojos como platos, desmesuradamente.
- ¿Qué has dicho?
Noto su creciente enfado.
Pero ya no tengo miedo. ¿Qué más da?
-No padre, ya no soy una niña a la que puedas decir qué hacer.
Está enfurecido.
En unos segundos ya lo tengo enfrente.
Su mano se estampa en mi mejilla con una inusitada fuerza, demasiada fuerza.
Su bofetada me ha impulsado hacia atrás, hacia la mesa, donde me golpeo la nuca.
Caigo al suelo, está todo borroso. Siento el sabor de la sangre en mi boca.
Mi pensamiento antes de desvanecerme es que quizás alguien sí que escuchó mi deseo de cumpleaños y ahora vaya al cielo a cumplir la promesa de mi madre.


El PRINCIPIO DEL FINAL.

Y así es como mi padre me mató.
Bueno, en realidad no, pero él creyó que lo había hecho, y como en la época los médicos no es que fuesen muy buenos, me dieron por muerta.
El 15 de agosto de 1034, en vez de celebrarse mi boda, se celebró mi funeral.

Trato de abrir los ojos, pero el esfuerzo me parece demasiado grande.
Alargo el brazo, pero lo dentengo a pocos centímetros. No puedo avanzar, hay algo que
me lo impide, ¿Una pared?
Parece estar recubierta de una tela suave…¿Satén?
Estoy en un lugar húmedo.
Empiezo a despertar.
Me duele la cabeza. Siento el sabor a sangre en la boca.
Alargo los brazos hacia los lados. Tampoco.Es como una especie de ¿Concha?¿Cama?
¿Dónde estoy?
Por fin consigo abrir los ojos, está muy oscuro.
Espera…¿Una cama forrada en satén?
Oh dios mio, me han enterrado.
Nononono…. ¡NO! ¿Por qué?
Golpeo la parte superior del ataúd, nada.
La araño, infligiéndome heridas en las manos, nada.
Grito, nada.
¿No hay nadie ahí fuera?
Grito desconsoladamente,hasta que apenas me queda voz.
Voy a morir enterrada vida.
Me cuesta respirar.
Amargas lágrimas me recorren las mejillas.
¿Por qué a mí?
Espera, oigo algo.
¿Alguien excava?
¿Me han oído?
Me ahogo, el aire no quiere llegar a mis pulmones.
Justo cuando pienso que ya no voy a poder aguantar más, la tapa se abre, cegándome momentaneamente la luz crepuscular.
Aspiro aire con fuerza.
Quiero ver el rostro de mi salvador.
Giro la cara hacia él, pero mi vista parece estar borrosa.
Aún así, consigo apreciar que el ser que me ha salvado, es un joven de una belleza a la que duele mirar.
Siento que pierdo el conocimiento.
¿Qué me pasa?
Quizás haya pasado demasiado tiempo sin respirar…
No quiero morir…¡No quiero!
El chico parece asustado.
Quiero decirle algo, pero no encuentro mi voz, mi oídos pitan.
Mueve los labios, pero no le escucho.
Me sacude levemente los hombros, pero noto como los ojos se me cierran.
Ahora sí le oigo.
-Tranquila, tranquila.-susurra casi con dulzura.
¿Qué quiere de mí?
Intento resistirme cuando se abalanza sobre mí y deposita un ¿beso? en mi cuello.
No es un beso,duele.
Se me escapa un gemido.
Siento como su dedo frío se desliza por mi mejilla,consolándome, pero yo estoy demasiado ocupada intentando reaccionar.
Me sumo en una semiinconscencia.
Aprieto los puños.
Me da de beber de su muñeca ¿Sangre?
Cierro los ojos, y consigo escapar , al menos mentalmente.

Así fue como yo encontré a mi primer amor. Christopher Long. No podía vivir con él durante mucho tiempo seguido, pero tampoco podíamos estar separados. Era algo muy complicado. Chris era todo lo que yo no era.
Tras trecientos años de tira y afloja decidí poner fin. Le dije que necesitaba ser libre, y no le mentí. Creo que en un principio pensábamos que sería como las demás rupturas, pero conseguí superar más o menos mi adicción a él.
Ahora he ido a Cave Springs, un lugar en el que ya había vivido antes. Se suele decir, que la historia tiende a repetirse.


Última edición por Giulia Roseti el Dom Sep 06, 2009 12:12 pm, editado 6 veces
Giulia Roseti
Giulia Roseti
Nuev@ en la ciudad
Nuev@ en la ciudad

Cantidad de envíos : 40
Fecha de inscripción : 14/07/2009

Volver arriba Ir abajo

Giulia Angelique Roseti Empty Re: Giulia Angelique Roseti

Mensaje por Bloody Mayor Mar Jul 14, 2009 1:08 pm

Bienvenida! Una historia impactante Wink

PD: pásate por rangos para conseguir casa, algún trabajo o crear una alianza.
Bloody Mayor
Bloody Mayor
Admin

Cantidad de envíos : 209
Fecha de inscripción : 06/07/2009

https://chachiforo2.activoforo.com

Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.