Caminando entre tumbas (libre)

Era un extraño lugar. Hasta el cementerio mismo era distinto a cualquiera que hubiera visitado antes. Sonrei recordando los innumerables funerales a lso que habia asistido. Compañeros de universidades humanas que misteriosamente habian aparecido muertos, con la garganta desrtrozada y golpes en el cuerpo. Yo siempre era la culpable y me encantaba. Mire fijamente una tumba y me pregunte quien o que habria acabado con la vida de aquel hombre.

Caminaba entre las tumbas, tarareando una cancion, por la noche ese lugar era algo tetrico, eso me gustaba. Solia ir por ahi, hacia algunos experimentos en mi casa, y para ello, algunas veces requerian partes humanas, asi que solia venir al cementerio a por ellas.

Paseando aquella noche, me adentre en el cementerio, no era una cosa que soliera hacer pero me habia prometido perder el miedo un dia de estos y poco a poco por las cosas que me pasaban, lo iba consiguiendo. Aun asi tenia mucho respeto al susodicho. Camine entre las tumbas que habia, recorde que aqui era donde habiamos enterrado en un primer momento a mis padres hasta hace un año que los trasladamos a otro cementerio mas seguro.

Escuche varios pasos a mi alrededor y deje de respirar. Solia hacerlo para no ser descubierta aunque lo mas probable era que si se trataba de un vampiro o algun licantropo, me descubrieran por mi olor.

Esta ves, necesitaba un higado para mis experimentos, asi que me dispuse a buscar una tumba reciente, seria el higado en mejor estado.
Entonces note varias presencias, gracias a mi experiencia, ya que ya tenia muchisimos años, deduje que era un vampiro y un teriantropo.
No estaba solo, tenia que estar atento.

Escuche el sonido de aquella vos. No era conocida pero no parecia peligrosa. Segui el olor y el sonido y me acerque.
- Hola - susurre de repente.
Esperaba no haberla asustado, aunque al notar que era una teriantropo dudaba que pudiera hacerlo.

Por fin encontre una tumba, era reciente, de unos dias atras, asi que empece a excabar con la pala que me habia traido, debia hacerlo rapido, antes de que me descubrieran.

El ruido me distrajo. No me gustaba que profanaran las tumbas. Corri hacia el lugar de donde provenia el sonido y enmudeci al ver a un vampiro excavando. Mis musculos se tensaron. Me daba mala espina, parecia peligroso.
- ¿Que haces? - le pregunte con frialdad - No deberias profanar tumbas.

Segui corriendo hacia la donde iba la chica con la que me habia topado y nos topamos con un tio que estaba cavando una tumba,al levantar la cabeza reconoci quien era, el vampiro de la otra noche, con cara de loco.

- Oh Oh! A mi este tio me da mucho miedo!

Me habian encontrado, como yo temia. Me gire despacio, y me quede mirando fijamente a Elizabeth Gladion.

-Tienes algo en contra?- Dije muy friamente.

Lo mire y asenti con la cabeza.
- No me gusta que se molesten a los muertos - musite mirandolo - ¿Que pretendes hacer?

-Pues mira, te voy a ser sincero, pretendo sacarle los organos a este muerto, llevarmelos y dejar el muerto ahi fuera, para que se lo coman los cuervos, contenta?- Dije con sarcasmo, aunque era totalmente cierto lo que habia dicho.

Me molestaba mucho que me molestaran, ademas, debia hacer algo con aquellas dos chicas, para que no se fueran de la lengua con lo que acababan de ver.

- No - musite con frialdad - ¿puedo saber para que? ¿Que tiene eso de divertido?
Notaba que lo molestabamos pero poco me importaba.

Yo sinceramente estaba acojonada con la situacion y con ese tio asique poco a poco me fui poniendo las manos en la ropa por si tenia que arrancarla para convertirme

Un ruido me desconcentro y un enorme lobo blanco aparecio de entre las tumbas. Habia olvidado que tambien estaba en el lugar.
- Spartacus - musite mirando tanto al vampiro como a la teriantropo - Ven aqui.
El lobo se acerco y gruño en direccion al vampiro. Me pare a su lado, temerosa de que lo atacaran. Mostre mis colmillos, lista para cualquier tipo de enfrentamiento. A mi lobo no lo iban a tocar.

Que ingenuos que eran... no sabian que tenia demasiada experiencia en situaciones como esas.
Solte la pala, y esta cayo sobre la lapida esprepitosamente.
-Algo tendremos que hacer para que no os vayais de la lengua con lo que habeis visto no?- Dije mientras sacaba mis colmillos, que eran mas largos que la media de los vampiros.

Cerre los puños irritada.
- ¿Que piensas hacer? - pregunte - ¿Matarnos? y ademas, ¿quien dijo que nos iriamos de boca? ¿Acaso no sabes que los vampiros y teriantropos suelen guardar muchos secretos?
Spartacus dio un paso al frente y lo obligue a retroceder.

Acojonada del todo, no podia pensar en otra cosa, asenti cuando confirmo la chica que callariamos y no diriamos nada a nadie sobre el tema de este chalado.
- No diremos nada, lo juro!

Me acerque mas hacia ellas.

-Deberiais relajaros, oleis demasiado a miedo...

Gruñi irritada.
- No tengo miedo - musite dando un paso adelante - y menos a ti.
Me daba mala espina, eso era cierto, pero mied ¿Yo, elizabeth gladion con miedo? Eso era muy poco probable.
- Lo que no quiero es pelear - musite - es incoherente que dos vampiros se peleen.
Era mentira, adoraba pelear con quien fuera pero no era el momento mas adecuado, no estaba sola. Spartacus y Afry me acompañaban.

-Pues deverias tenerlo, no creo que te haga mucha ilusion despertarte un dia, y ver a tu chucho descuartizado no?
Saque el feretro del agujero y lo saque fuera.
-Vamos a ver que tienes para mi...- Dije como hablando con el muerto

Entrecerre los ojos, enfadada.
- No te metas con mi lobo - murmure y acote - No se si sabias, pero los muertos no suelen hablar, asi que no se por que tu les hablas a ellos.
Suspire irritada y lo mire.
- Bicho raro - comente para mi misma.

-Oid, porque no os perdeis por ahi un rato, ya os matare luego, que tengo cosas que hacer.
Dije mientras rompia la tapa del ataud, y sacaba una bolsa que llevaba conmigo, donde tenia mis instrumentos.

- ¿Ya nos mataras luego? - pregunte con una fria sonrisa - No me ire a ningun lado - exclame molesta - Sonara como niña malcriada pero yo estaba aqui antes que tu, en todo caso el que se debe ir es otro - musite mirandolo fijamente y observe lo que hacia.
Cuando abrio el ataud no pude contener un gruñido de asco.
- Que asco - murmure bajo.