Todos cambian [Maddy]

- Voy a fumarme un cigarrillo y en seguida voy - Dije en voz alta mientras una risa bastante dulce salía del baño - Desmontas a la gente, hacia por lo menos diez años que no probaba un pitillo - Dije mientras buscaba algo agitado en unos pantalones que estaban tirados por el suelo - Y ahora fumas cada día... ¡no intentes echarme la culpa porque yo apenas fumo! - Dijo la voz de una chica que salía del baño. Cuando por fin encontré el paquete de tabaco me quedé observandolo unos segundos y lo dejé sobre la mesa. Comencé a desabrocharme la camisa mientras iba a por una cerveza. Dejé la camisa en un sillón y fui con la cerveza al baño. Las luces estaban apagadas, había una decena de velas y vapor salía lentamente por la puerta - Me lo he pensado mejor... - Dejé la cerveza en el suelo junto a la bañera, ocupada por una guapa joven, y me deshice del resto de mi ropa - Me siento bastante culpable de todo esto - DIje sonriendo. - ¿Por qué? Solo estás... cuidandole el apartamento

- ¡Madison !- Dije alegre - No te pongas así hombre! - Intenté agarrar una toalla mientras Orson se tapaba los ojos muy avergonzado. Salí sin ningun pudor y me puse una toalla - ¿Te acuerdas de mí? Perdona todo este lío, ya me iba eh

Salí del baño con una toalla en la cintura. Ava recogió toda la ropa y me dió la mía, dandome un beso de despedida - Disfruta de tu viaje. Nos lo hemos pasado bien hoy ¿eh? - Sonreí mientras nos besamos por última vez. Ava se marchó apresurada.
Me encendí un cigarro y fui a ver a Madison - Siento haber usado tu casa... pero no tengo otro sitio y... bueno, y además te he regado las plantas y esas cosas... - Dije arrascandome la cabeza - No he usado tu dinero. Y el que te cogí prestado te lo devuelvo ahora mismo si quieres

- Es una casa muy grande... - Di una intensa calada - Vamos Madison, te tiraste a Travis... ¿y ahora eres tú la victima? Desapareciste. Hay que mover ficha, la vida continua.... eres guapa, joven, con dinero ¿por qué no nos dejamos de malos rollos y solo vivimos sin preocupaciones? - Sonreí apoyandome en el marco de la puerta.

- Ava es sólo una amiga y no la conoces asi que no la llames golfa. Y se ha ido de... vacaciones. Como tú - Me acerqué a la ventana junto a ella - ¿Por qué te fuiste?

- Sí, la mejor manera de solucionar los problemas es huyendo de ellos, eh - DIje levantando una ceja - Travis está bien. Le operaron hace un par de meses, por eso nos tuvimos que ir tan rápido. Pero ahora está bien, se va a comprar una casa por aquí... o algo así me dijo.

- ¿Hubieses preferido verme destrozado echándote de menos? Ni siquiera cogiste mis llamadas - Me entró un fuerte escalofrio - Voy a ponerme algo - Me acerqué al sillón donde estaba mi ropa - ¿Y tú? ¿A quien echaste de menos?

Solté una amplia carcajada - Seguro que ella también te ha echado de menos - Terminé de ponerme los pantalones cuando ella preguntó si había algo de comer. Cogí mi camiseta y me la fui poniendo mientras me acercaba a Madison - Sí, hice la compra hace un par de días - Me acerqué a ella y me agaché a buscar un recipiente que guardé en el frigorifico - Ayer sobró un poco de pastel de carne que hice - Lo cogí y al levantarme estabamos cara a cara - Has vuelto preciosa - Sonreí e imediatamente dejé el recipiente en la encimera y me senté en ella de un salto - ¿No me vas a contar que has hecho en tus vacaciones?

- Lo puedes comer como quieras - Dije mirándola contento - Por cierto... he hecho algo que... bueno, espero que no te importe pero... he usado una habitación tuya como... como estudio- Me encogí un poco - Ahora pinto - Esbocé media sonrisa, como la de un niño travieso - Ava dice que se me da bien y... bueno, espero que no te importe... hay mucha luz en la casa y esa habitación es perfecta

- La verdad... te hice uno. Ven - La cogí de la mano y casi tiré de ella hasta la habitación. La habitación estaba un poco desordenada, el suelo tenía algunas manchas y había un monton de lienzos, la mitad de ellos en blanco. Cogí el cuadro y se lo enseñé. Era bastante grande y no se parecía en nada a ella. En el cuadro aparecía una mujer semidesnuda . El cuerpo estaba pintado de colores extraños, en algunos lados simulaba a la piel de un felino - ¿Qué te parece?

- Ava me lo aconsejó - Me lo aconsejó para superar el tema con Madison - Desestresa mucho la verdad - Saqué un gran lienzo bastante extraño, no eran más que manchurrones de colores - Usé casi todo el cuerpo haciendo este - Dije riendo

- ¿Ah, si? Quizá te hace falta unas buenas gafas porque está claro que estás un poco ciega - Metí de reojo el dedo en un bote de pintura amarilla y dibujé sobre los ojos de Madison dos circulos lentamente - Creo que asi está mejor... espera, le faltan las patillas - Dije mientras me mordía la lengua.

Sonreí ladeando la cabeza y dejando que ella me pintase - Creo que ya es suficiente ¿no? - Dije dandome la vuelta. Metí los dedos en otro bote - Me falta la firma! - Me giré hacia ella y sujetandola con una mano le volví a pintar en la cara