Cena italiana (Claudia)

Una vez recogí a Claudia, fuimos ambos hacia la calle principal. Había reservado mesa en el Stephano. Le costaria un ojo de la cara, pero bueno, una vez era una vez. Vestía unos vaqueros, una camisa y una chaqueta de cuero, luego unas mocasines. Habíamos ido en moto, una que había logrado reparar y ahora, él la tenia.

Observé a Claudia y sonreí mientras caminábamos:

-Bueno, y aqui estamos, una cena italiana y despues, sorpresa - sonreí. Habia pedido al dueño del local, aunque le costo algo mas caro, que le guardara una cosa a Claudia para cuando ambos estuvieramos sentados. - Por cierto, estas preciosa - sonreí de medio lado mientras le ofrecia mi mano y entrábamos.

Chris vino a buscarme en moto y con una chaqueta de cuero. No pude evitar una sonrisa cuando le ví llegar a través del escaparate. Fuimos hasta Main Street; la verdad es que la calle estaba bastante concurrida a pesar de las lluvias. Comenzamos a caminar hasta que nos detuvimos frente a un restaurante italiano, Stephano´s.

- ¿Una sorpresa? - me cogí las manos - ¡Genial, me encantan las sorpresas! - me ruboricé un poco cuando me dijo aquel piropo; le dí un suave golpe en el pecho y añadí - Nah, ¿qué dices? Estoy como siempre.

Chris me ofreció su mano y yo la cogí con una sonrisa, apretándola. Pasamos al interior; me hizo gracia ver a la gente bien arreglada y nosotros en vaqueros... La chaqueta de cuero hacía que Chris resaltase entre todo el mundo pero yo pensaba que le quedaba genial... Por fin, nos sentamos y esperamos a que viniera el camarero.

- Espero que no pongan más de un tenedor... - dije en voz baja - No tengo ni idea de protocolo...

-¿Protocolo? En 100 años no he tenido que tragarme ninguna de esas mariconadas y desde luego no va a ser ahora - susurré lo ultimo para reirme, suspiré, mirando a mi alrededor, desde luego todo el mundo iba bastante arreglado. Ladee la cabeza mientras chasqueaba los dedos y miré al camarero que vino:

-Señor, lo que pida la señorita, y para mi una cerveza, y dile al jefe que traiga lo que pedí, a nombre de Chris Sutherland - sonreí para despues mirarla a ella. - Ale, elige que quieres para cenar - dije tranquilamente.

Miré un momento al camarero irse, y despues miré hacia el aseo.

-¿Me disculpas un minuto?- preguinté mientras me levantaba.

Reí por lo bajinis ante su comentario; en ese sentido éramos muy parecidos, no nos gustaba demasiado aparentar, era mejor la naturalidad... El camarero acudió ante el gesto de Chris; cuando él habló, le miré intrigada, ¿qué se le habría ocurrido?

- Yo quiero una coca cola para beber y para comer... unos spaguettis a la carbonara...

El camarero se marchó después de mirarnos de una forma un tanto rara. Chris se levantó para ir al servicio y yo asentí con la cabeza mientras cogía un pellizco del pan que habían dejado en una cesta. Me giré para observar al camarero, estaba intrigada...

Una vez fui tras el camarero, me metí por una puerta, y otro camarero, me dio una cajita. Sonreí de medio lado asintiendo para despues salir, me rasqué la nuca pensativo un momento y abrí la caja tranquilamente para coger su contenido y despues, guardarlo en mi bolsillo.

Eché a caminar nuevamente, saliendo de la habitacion. Comprobé que Claudia no miraba y sonreí, para tomar el collar y ponerselo como podía en su cuello. Finalmente, abroché aquella cadena de plata, con um simbolo celta como colgante.

-Espero que te guste, las flores ya las he mandado a casa, pero, esto preferí entregartelo aqui y ahora - sonreí.

Suspiré, mientras vagaba mi mirada por la gente que estaba allí cenando, cuando de repente sentí algo a mis espaldas y ví una cadena de plata que sostenía un precioso colgante celta. Noté el perfume de Chris y enseguida supe que era él. Cuando por fin se puso enfrente de mí, exclamé:

- ¡Pero es precioso, Chris! - bajé la mirada para admirar el colgante - ¡Y flores! ¡Estoy deseando llegar a casa para verlas! ¿Cómo te lo puedo agradecer? Me siento tan... tan halagada....

Le miré con una sonrisa y ojos brillantes.

Sonreí, alegrandome de que le agradara el colgante, y no pude evitar reirme de lo que dijo. Sonreí de medio lado, y simplemente, la tomé de la mano, agachandome algo sin importarme las otras personas:

-Me lo podrias agradecer, no sé...[/b - la miré bromeando pero me aclaré la gargante y comencé a hablar seriamente., -[b]Verás, tú, me agradas, me gustas y... pensaba en, pedirte salir, algo más, en serio, y, ehm, a pesar de ser mas viejo que Matusalen... - la miré a los ojos. -Me gustaria poder curarme y asi, que, no sé, no fuera yo un bicho raro y poder estar contigoi...

Chris me cogió de la mano y me dijo aquello de sopetón; no pude evitar sonreir todo el tiempo mientras me hablaba, riendo cuando hizo aquella comparación con Matusalén... Puse mi mano sobre la suya y dije:

- De acuerdo, siempre me han gustado los chicos más mayores que yo - bromeé y después pasé mis dedos por su mejilla - Me encantará salir contigo y ser... algo más.

Sentí que me estaba ruborizando ante la mirada de Chris y desvié unos segundos la mirada para después volver a poner en sus ojos.

Una caricia. Hacia tiempo que no recordaba una. La mire a sus ojos sonriente ante sus palabras para después acercar lentamente mi rostro al suyo y besar sus labios suavemente pero con algo de timidez. Disfrute de sus labios durante unos segundos que desee que nunca acabaran. Tenía clara una cosa, y era que a pesar de todo, quería a Claudia.

Chris se acercó a mí y posó sus labios sobre los míos; yo cerré los ojos para disfrutar de él, sintiendo un estremecimiento que me recorría la espalda. Acaricié sus cabellos con una mano mientras posaba la otra sobre su hombro. Sólo fueron unos segundos pero tuve la sensación de que el tiempo se paraba para los dos... Cuando se separó de mí, le miré a los ojos y le sonreí; entonces, escuché un carraspeo: el camarero nos traía las bebidas. Cuando nos sirvió y se fue, me incliné hacia Chris y dije en voz baja:

- Espero que no tarden mucho en traernos la cena... tengo ganas de ver esas flores... - después extendí mi mano hacia él, posándole en su antebrazo - Gracias por una noche tan perfecta...

Su caricia, el tacto de sus labios, me gustaron. Demasiado tiempo sin duda alguna de saborear un beso. En cuanto noté la mirada del camarero, me reí divertido, levantandome nuevamente y volviendo a mi sitio:

-Eso espero - me reí y observé su mano en mi antebrazo y sonreí calidamente, y luego, escuché el resto de sus palabras: -No, gracias a ti por ser perfecta - dije sincero, mirandola a los ojos.

Bajé la mirada unos segundos, ruborizándome pero con los ojos brillantes. Nunca había imaginado encontrar a alguien tan especial como Chris y no me refería a su condición de... inmortalidad o longevidad, sino a su manera de ser, tan sencillo, tan agradable, tan sincero...

- ¿Perfecta? Espera a verme recién levantada y de mal humor, seguro que sales corriendo...

El camarero apareció con nuestra cena; olía de maravilla y me dí cuenta de que estaba hambrienta, ¿o quizá es que estaba feliz y por eso me sentía así?

- Hacía mucho tiempo que no cenaba fuera de casa...

-Igual de preciosa fijo, y si dices eso, imaginate yo durmiendo, suelo roncar demasiado - bromeé para despues, observar como nos traian la comida. Sonreí de medio lado: -Me costará un ojo de la cara, pero esto tiene muy buena pinta - dije.

-En fin, ¡al ataque! - dije antes de ponerme a comer.

- ¿Roncas? - pregunté frunciendo el ceño en tono de broma - Oh, vaya... habrá que taparte la nariz por las noches...

Le miré cuando dijo aquello sobre el precio de la cena.

- Chris, no hace falta que lo pagues tú todo, podemos ir a medias, como las parejas modernas - dije mientras empezaba a comer - Sé que no eres millonario, precisamente, y a mí me da igual. La próxima vez, un Burguer King - añadí riendo.

Seguimos comiendo mientras hablábamos de varias cosas sin importancia; por fin, llegó la hora de lo postres y no pude evitar pedirme un helado de chocolate, a pesar del frio que hacía fuera.

-Creo que no me dejaré - sonreí de medio lado. Escuché lo que dijo, y me pasé la mano por la nuca:

-Como tu quieras, con el dinero restante, yo que se, puedo alquilar una pelicula para luego verla - me reí, mientras comia, hasta que finalmente, trajeron los postres, yo no me pedí nada, estaba ya lleno.

Chris no se pidió postre y me sentí como una golosa comiéndome mi helado de chocolate, pero es que no podía evitarlo, ¡lo adoraba!

- Una peli, me encanta la idea - dije mientras rebañaba la copa de cristal en la que me habían servido el helado - Con esta lluvia lo ideal es taparse con una manta y ver una peli... Además, creo que tengo más helado en casa y palomitas - le guiñé un ojo.

Por fin terminamos y logramos ponernos de acuerdo para pagar y salir de allí, después del espectáculo. Mientras nos dirigíamos a la salida, miré el colgante celta que Chris me había regalado y sonreí feliz.

-Bien, pues, iremos a ver pelicula. Y es verdad, una buena manta, una pelicula, nosotros dos tapaditos... - sonreí mientras finalmente, conseguí pagar algo y finalmente, la tomé de la mano y echamos a caminar fuera de aquel lugar.

[OFF: ¿Abres? xD]

[Off: voy ^^]